Un recorrido a lomo de caballo, que permite acceder a los puntos más altos para la observación de la Reserva, chequear el tránsito de los visitantes y la presencia de algún hecho fortuito, así es el día de patrullaje de Gastón León, el nuevo guardaparque de CONAF en la Reserva Nacional China Muerta.
Esta contratación fue una de las medidas concretas adoptadas por CONAF tras el incendio de la Reserva ocurrido el año pasado, que permite reincorporar un guardaparques a la Unidad, expresó el director de CONAF Araucanía, David Jouannet.
“Hoy día la Reserva China Muerta se siente más protegida, dado que no teníamos guardaparque y sólo estaba monitoreada desde el Parque Conguillío, pero ahora en este período estival, tenemos un guardaparque que permite transitar, recorrer, ver la gente, entregar información en este momento donde no hay nieve y donde es más visitado”, comentó Jouannet.
El director regional agregó que se buscó una persona del sector, “Gastón León es de “Cabeza de Indio”, por lo tanto conoce el territorio a cabalidad; se le entregó un caballo para hacer los recorridos en esta Reserva que es bien inhóspita, extensa y con una geografía de difícil acceso con quebradas y alturas considerables; así como la habilitación de un container para su casa- habitación.
PROTECCIÓN
“El cuidado es lo principal para mantener este lugar y mejorarlo. Por ser de la zona, lo que uno quiere es cuidar el bosque, tratar de hacerlo lo mejor posible”, aclaró Gastón León, guardaparque Reserva China Muerta, que convive en estos días de verano con flora y fauna de la Reserva.
La vigilancia es lo primordial en su rutina. “Debo patrullar el sector, ver que los turistas no hagan fuego, porque es una pena recordar lo que pasó el año pasado con el incendio. Yo soy del sector “Cabeza de Indio” y eso me permite más cercanía con la gente que está acá. La mayoría de mis vecinos sabe que yo soy el nuevo guardaparque y están contentos con este nombramiento, ya que existe una Asociación de Veraneantes que me había propuesto”, cuenta León.
Mauricio Sandoval, vecino del sector “Cabeza de Indio, aledaño en el acceso a China Muerta contó que la noticia del nuevo guarparque fue bien recepcionada por los vecinos.
“Nos parece muy bien que esté una persona vigilando la Reserva China Muerta para que no ocurra lo mismo que pasó el año pasado, fue lamentable, triste, porque nosotros vivimos de la Reserva y nuestro talaje, el bosque nativo se murió. Lo más bonito es la naturaleza y hoy está todo quemado, por eso es bueno que esté un guardaparque”, acotó Sandoval.
Recalcó que en caso de incendio, el guarparque avisa apenas detecta humo. “Se hace correr la voz entre nosotros, por celular (en los puntos donde hay cobertura), por la gente que trabaja arriba, los mismos turistas que entregan el mensaje”, concluyó.
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